Es raro explicar que escuchar a Lorca me calienta la sangre y que el flamenco me parece un montón de puñales directos a mi estómago y que me encantan. Es raro vivir en una generación en la que la gente se hace perfiles falsos para hacerte el lio. Tambien es bastante extraño que haya soñado que Otto me llamara para ir a tomar unos calderos de cervezas y le dijera que si. Ojalá solo existiera el agua normal y las mesas de mezclas llenas de strass y pegatinas de kitty. Que viva el horror vacui , el muro de la muerte, los hitanos rumanos y los cielos azules de verano. Estoy buscando la frecuencia que emita al universo que quiero un estudio bonito en Lavapiés para septiembre. Ayer me gritaron desde un coche “Reina Canalla te quiero” pero como no veo, no supe quien era, así que si lees esto, yo también te quiero a ti. Oviedo sigue siendo demasiado gris para mí incluso sin ti. Solo nosotros convertimos un secarral en Monegros. Cuando derriban un edificio, entre escombros me siento extrañamente tranquila y feliz, igual es porque no hay nada más bonito que un cristal roto en el suelo haciendo puzle. Igual que no hay nada más horrible que una persona mintiendo o peor, olvidando pronto.
Bañador: Reina Canalla Vintage
Bomber : Compañia Fantastica
Fotografía: Alvaro Ayarza – Abocados–
Mientras escribía este post sonaba : Agorazein feat Erik Urano – Gente normal.